Radio Comunitaria Garífuna Waruguma
Actividad
Derecho a la información; Derechos económicos, sociales y culturales (DESC), Defensora del territorio
Agresión sufrida
Amenaza de clausura
HECHOS - La Radio Comunitaria Waruguma, localizada en la ciudad de Trujillo, recibió una Resolución de parte de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (CONATEL), emitida el pasado 21 de marzo, en la que se la declara como “REBELDE” y en la que además aparece como si fuera propiedad de la OFRANEH. Esta es la segunda ocasión en que la Radio Waruguma es objeto de resoluciones con el propósito de clausurarlas. Ademas de la Radio Waruguma, la Radio Comunitaria Sugua en Sambo Creek, también fue objeto de amenazas de cierre por parte de CONATEL en el 2014.
La Red de Radios Comunitarias Garífunas cumple la función de informar y fortalecer la cultura y el idioma garífuna, atenuando la asimetría cultural y económica que los pueblos garífunas padecen en Honduras. No obstante, las radios comunitarias han tenido que afrontar un sinfín de problemáticas. Desde el incendio intencionado de la Radio Faluma Bimetu en 2010, hasta los emplazamientos de CONATEL, además de amenazas constantes, especialmente a partir del golpe de estado de 2009.
La persecución jurídica por parte de CONATEL es una violación a la Convención Interamericana de Derechos Humanos, la cual, en su artículo 13. 3, indica que “No se puede restringir el derecho de expresión por vías o medios indirectos, tales como el abuso de controles oficiales o particulares de papel para periódicos, de frecuencias radioeléctricas, o de enseres y aparatos usados en la difusión de información o por cualesquiera otros medios encaminados a impedir la comunicación y la circulación de ideas y opiniones”.
Desde la IM-Defensoras reconocemos la labor fundamental de las radios comunitarias para avanzar hacia el cumplimiento de los derechos económicos, sociales y culturales de los pueblos garífunas y exigimos al Estado hondureño, que de acuerdo a los estándares regionales e internacionales de derechos humanos, garantice y no ponga ningún obstáculo legal ni de ningún otro tipo a su existencia y funcionamiento y ejercicio de la plena libertad de expresión de las comunidades garífunas.