Mañana, domingo 6 de junio, se celebrarán elecciones en México para renovar a 500 integrantes de la Cámara de Diputados, gubernaturas de 15 estados y cerca de 20 mil cargos locales. El proceso electoral se ha desarrollado en un contexto de violencia en diferentes entidades federativas que desde hace décadas enfrentan un clima de temor y restricción de la participación política, el ejercicio periodístico y la defensa de derechos humanos.
Las mujeres defensoras y periodistas son objeto de agresiones que se exacerban por la discriminación y la violencia de género. Solo en 2020 la Red Nacional de Defensoras documentó 1520 agresiones y 7 asesinatos contra mujeres defensoras, periodistas y colectivas de derechos humanos. Este 2021 hemos advertido un entorno particularmente hostil para quienes defienden los derechos humanos, ejercen la labor periodística y las feministas.
En este marco, ayer viernes, 4 de junio, Comunicación e Información de la Mujer A.C. (CIMAC) y la Red Nacional de Defensoras de Derechos humanos en México enviaron una comunicación a las autoridades estatales de Guanajuato, Sonora, Sinaloa, San Luis Potosí, Puebla, Nuevo León, Michoacán, Jalisco, Guerrero, Estado de México, Coahuila, Chihuahua, Chiapas, Campeche, Baja California Norte, Tamaulipas y Veracruz, entidades donde en el marco de la jornada electoral se advierte un mayor riesgo para mujeres periodistas y defensoras de derechos humanos, demandando se tomen las medidas necesarias para garantizar que éstas puedan llevar a cabo su fundamental labor de información, acompañamiento y monitoreo de violaciones de derechos humanos.
Desde la IM-Defensoras y la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en Mexico, tenemos especial preocupación por las agresiones que puedan cometer actores como equipos de campaña, simpatizantes y militantes de partidos políticos, personas candidatas a puestos de elección, así como elementos de seguridad y la función pública contra mujeres periodistas y defensoras. Nos preocupa también la connivencia entre autoridades locales y grupos del crimen organizado y el riesgo que esto significa para la población en general y en particular para quienes documentan violaciones a derechos humanos, así como los discursos y acciones de odio y estigmatización que grupos conservadores y anti-derechos puedan emitir en contra las mujeres defensoras y periodistas.
Desde la Red Nacional de Defensoras de México, integrante de la IM-Defensoras, estaremos vigilantes y denunciando cualquier acto de hostigamiento, obstaculización de la labor periodística, difamación, criminalización y violencia sexual contra nuestras compañeras defensoras y periodistas.
Reiteramos el llamado urgente a las autoridades estatales y a nivel federal así como a los partidos políticos para que garanticen el respeto a los derechos humanos de las defensoras y periodistas para que puedan, en el marco de la jornada electoral, desarrollar su labor informativa y de defensa de derechos humanos en condiciones de libertad y seguridad.