La investigación periodística internacional Pegasus Project, coordinada por Forbidden Stories, con el apoyo técnico del Security Lab de Amnistía Internacional, reveló que entre 2016 y 2017 más de 50 mil números telefónicos fueron potencialmente infectados por el malware de espionaje.
Dentro de la lista de las 109 personas defensoras que pudieran haber sido infectadas por el malware Pegasus se encuentra Yésica Sánchez Maya, abogada, defensora de derechos humanos e integrante del Equipo Directivo de Consorcio Oaxaca. Consorcio Oaxaca es organización fundadora e integrante de los grupos impulsores de la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en México y la IM-Defensoras. El ataque en su contra es una grave e ilegal intrusión a su vida personal y su trabajo como activista que vulnera su intimidad y pone en riesgo su integridad, la de su familia y la de las organizaciones y víctimas de derechos humanos que acompaña. Como ella otras compañeras defensoras y periodistas fueron vigiladas.
En 2017 la investigación conocida como “Gobierno Espía” había revelado el uso de Pegasus y espionaje por parte del Gobierno Mexicano durante el sexenio de Enrique Peña Nieto. En este sexenio organizaciones de derechos humanos documentamos ejecuciones extrajudiciales, desapariciones forzadas, detenciones arbitrarias, entre otras graves violaciones a derechos humanos por parte del gobierno en contra de activistas, periodistas independientes y movimientos sociales. El uso de esta tecnología ilegal habría aportado información clave para cometer estas agresiones al permitir intrusiones profundas en los dispositivos de las personas vigiladas. En un contexto marcado además por la violencia y la discrminación de género, el espionaje contra mujeres defensoras y periodistas genera impactos específicos y las coloca en una situación de mayor riesgo.
Desde IM-Defensoras y la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en México expresamos nuestro repudio a este tipo de prácticas y la preocupación por el alto nivel de vulnerabilidad y riesgo que provoca el espionaje a nuestra labor de defensa de derechos humanos. Esperamos una respuesta contundente del Estado mexicano y todas sus instancias correspondientes que haga efectiva la protección y seguridad para las personas defensoras de derechos humanos, así como la garantía de acceso a la justicia para todas las víctimas y la no repetición de estas graves vulneraciones. Para ello resulta apremiante la realización de una investigación exhaustiva, imparcial y pronta que permita identificar a todos los responsables intelectuales y materiales de la financiación y de la operación del espionaje.
Expresamos toda la solidaridad y apoyo a nuestra compañera Yésica Sánchez y a todas las demás víctimas y nos mantendremos alertas y vigilantes ante estos hechos.