Desde el 10 de abril de 2022, en la IM-Defensoras hemos registrado 156 agresiones contra defensoras de derechos humanos en Nicaragua. De éstas, 147 corresponden a agresiones personales contra defensoras y las 9 restantes contra organizaciones que defienden derechos de las mujeres o están integradas por defensoras. Esta escalada de las agresiones se produce en el marco del 4to aniversario del estallido social del 18 de abril de 2018 con el objetivo, por parte del gobierno de Daniel Ortega, de imponer su política de terror, control social y estado policial para evitar cualquier expresión de protesta o conmemoración.
Se han reportado agresiones en 60% de los departamentos del país y en una de las Regiones Autónomas de la Costa Caribe. Las agresiones se han perpetrado contra defensoras que defienden diversos derechos: tierra y territorio, participación política y comunitaria de las mujeres, derecho a la información y libertad de expresión, derechos de los pueblos indígenas, derecho a la verdad, justicia y reparación, a una vida libre de violencia y el derecho a defender derechos. Cabe destacar que 45% de estas agresiones sucedieron entre el 18 y 19 de abril.
Según el tipo de agresión, se reportaron 55 actos de intimidación y hostigamiento y 45 restricciones a la libertad de movimiento. También se registraron 4 allanamientos a viviendas de defensoras y una detención seguida de la desaparición forzada de una mujer activista desde el arte y la cultura, como parte de la represión hacia la música de protesta que se ha producido en el país a partir de 2018, así como 11 agresiones relacionadas con investigaciones ilegales, interrogatorios y seguimientos.
En 74% de las agresiones las defensoras identifican a policías como responsables, en 13% a autoridades estatales y en aproximadamente 7% a grupos de civiles no identificados.
Este incremento de las agresiones contra las defensoras y sus organizaciones es consistente con el comportamiento represivo mostrado por el Estado con relación a determinadas fechas conmemorativas de relevante significado socio-político. Durante los últimos años, desde la IM-Defensoras hemos registrado un patrón de aumento sistemático de las agresiones contra las defensoras durante un periodo que comprende aproximadamente 10 días alrededor de estas efemérides (previo, durante y posteriores a las mismas).
También es importante destacar que esta intensificación en los ataques se produce después de que la vice presidenta, Rosario Murillo, hiciera públicos diversos mensajes de odio hacia el movimiento amplio de disidencia en el país.
Ante esta situación, que atenta contra la vida e integridad de las defensoras nicaragüenses, sus familias, comunidades y espacios de organización, reiteramos nuestro llamado a la comunidad internacional para que esté especialmente alerta y vigilante de la situación que viven en el país quienes defienden los derechos humanos y trabajan por una sociedad más justa e igualitaria.
Desde la IM-Defensoras seguimos observando y denunciando estos hechos y no dejaremos de expresar nuestra admiración, nuestra solidaridad y nuestro apoyo a las defensoras nicaragüenses en su incansable y fundamental trabajo, así como en sus dignas y legítimas demandas de justicia y libertad.