Las organizaciones que integramos la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos “Todos los Derechos para Todas, Todos y Todes” (Red TDT), La Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en México y la Iniciativa Mesoamericana de Mujeres Defensoras de Derechos Humanos (IM-Defensoras) condenamos las declaraciones en contra del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Centro ProDH), reconocemos su trabajo documental y profesional en defensa de las víctimas que acompañan.
El Centro ProDH desde hace más de 35 años, ha promovido, defendido y acompañando a personas y colectivos principalmente indígenas, mujeres, migrantes y víctimas de represión social, impulsando avances en la vigencia de los derechos humanos en México y atendiendo los impactos de las múltiples violaciones a Derechos Humanos.
Las personas defensoras de los derechos humanos y los periodistas desempeñamos un papel fundamental en la salvaguarda de los valores democráticos, la promoción de la rendición de cuentas y el fomento de una sociedad justa, con posicionamientos críticos para abonar al horizonte de paz con justicia y dignidad, y cualquier intento de socavar sus esfuerzos a través de la difamación debe cesar inmediatamente.
Ante las descalificaciones a su labor, reconocemos que el Centro ProDH ha desempeñado un papel de suma relevancia en el acompañamiento a las familias de Ayotzinapa, así como una labor de observación y análisis ante los crímenes de lesa humanidad cometidos por el Ejército Mexicano.
Hacemos un llamado al Gobierno Federal para que se reconozca y aprecie públicamente su labor, como un aporte a la vida democrática del país, así como a fortalecer los medios y mecanismos de protección para las personas defensoras y periodistas, garantizando su derecho a defender los derechos humanos sin riesgo, en libertad, sin temor a difamaciones, represalias o acciones en su contra.
Atendiendo a estas demandas, el Gobierno Federal puede demostrar su compromiso con los derechos humanos, la libertad de prensa y los principios rectores de la democracia.
Nuestra solidaridad, acuerpamiento y respaldo al Centro ProDH, “Hasta que la dignidad se haga costumbre”.