Hedme Castro y Tommy Morales
Organización
ACI-Participa, ASOPODEHU, Red Nacional de Defensoras de DDHH en Honduras
Actividad
Derecho a defender derechos
Agresión sufrida
Detención arbitraria, Uso excesivo de la fuerza, Criminalización
HECHOS - Hedme Castro (ACI-Participa) y Tommy Morales (ASOPODEHU) fueron objeto de agresiones, detención arbitraria y criminalización cuando, en el marco del desalojo violento de estudiantes de la UNAH del que emitimos #AlertaDefensoras el 8 de septiembre, trataban de llevar a cabo su labor de acompañamiento y vigilancia al respeto de los derechos de los y las estudiantes reprimidas por las fuerzas de seguridad.
Los hechos acaecieron cuando las defensoras acudieron en un bus facilitado por el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (CONADEH) a rescatar a 7 estudiantes que estaban escondidos por miedo a ser detenidos. La policía interceptó el bus con una grúa, bajándolo y subiéndolo a modo de amenaza, para a continuación gasearlo mientras bajaban los estudiantes, defensores y defensoras, quienes fueron esposadas y detenidas. Todo esto ocurrió frente a periodistas que estaban documentando los hechos.
Como consecuencia, Tommy Morales, que padece asma, tuvo que ser hospitalizada y junto con Hedme Castro y dos compañeros defensores recibieron medidas sustitutivas, ascendiendo ya a 26 el número de personas detenidas en el proceso.
Resulta muy preocupante que las autoridades de la UNAH han declarado “Estado de sitio” en las instalaciones de la universidad y están pidiendo que se quiten las medidas sustitutivas a los estudiantes y a quienes los defienden para encarcelarles con el objetivo de inhibir la protesta. Ello unido a la campaña de estigmatización sostenida en los medios contra el movimiento estudiantil.
Desde la IM-Defensoras condenamos este nuevo acto de violencia y represión y, de manera específica, repudiamos y alertamos sobre la gravedad del ataque dirigido contra quienes cumplían con su labor de acompañamiento y vigilancia al respeto de los derechos de los estudiantes, el cual delata la nula disposición del Estado hondureño y las autoridades universitarias respecto a los derechos humanos y a su obligación de garantizar el trabajo y la seguridad de quienes los defienden.
También hacemos un llamado a la comunidad internacional para que manfieste su repulsa ante lo sucedido y se mantenga al pendiente y vigilante de la situación.