Rolanda de Jesús García
Actividad
Derecho a la información
Agresiones sufridas
Intimidación, amenazas, insultos, acoso sexual, retención y atentado contra la libertad de expresión.
HECHOS - El lunes 20 de agosto, la periodista Rolanda de Jesús García, acompañada de autoridades del Órgano de Coordinación del Consejo Comunitario de Desarrollo (COCODE), estaba registrando para el canal internacional de televisión Telesur la tala ilegal de árboles en las riveras del Río Cahabón, relacionada con la ejecución de los proyectos hidroeléctricos Oxec cuando fue interceptada por un grupo de trabajadores que cuestionaron la presencia de cámaras en el lugar y la obligaron a marchar con insultos, acoso sexual y la amenza de violarla y echarla al río, entre otras.
Pese a que la periodista y sus acompañantes se retiraron del lugar, un grupo de seis hombres armados con machetes les siguieron hasta interceptar a Rolanda de Jesús García de nuevo, aíslandola y reteniéndola a la fuerza. Durante la retencion, los trabajadores de Oxec reiteraron los insultos y amenazas, la de violación incluída, con el fin de requisar el material registrado por la periodista, el cual estaba a salvo en manos de uno de sus acompañantes. Tras acordar, bajo coacción y amenazas, no difundir dicho material, Rolanda consiguió escapar y contactar con la Policía para interponer una denuncia por lo sucedido.
Desde la IM-Defensoras y la Red de Defensoras de Derechos Humanos de Guatemala repudiamos y condenamos estos hechos y, de manera muy especial, el acoso sexual y las amenazas de violación y femicidio orientadas específicamente al ser mujer de la periodista, y exigimos al Estado de Guatemala que depure todas las responsabilidades jurídicas y penales que puedan derivarse, para que sucesos intolerables como éste no queden en la impunidad. Asimismo exigimos garantías de protección para ella y de poder seguir ejerciendo su profesión y su derecho a la libertad de expresión e información sin coacciones de ningún tipo.
Finalmente, le expresamos todo nuestro apoyo y sororidad e invitamos a la comunidad internacional a hacer lo mismo y a seguir pendiente del caso.