Celia Cruz
Activista y presa política
La activista nicaragüense y presa política Celia Cruz, quien se encuentra privada de libertad en el centro penitenciario Jorge Navarro ("La Modelo"), ha sido amenazada de muerte por Erickson Castillo, preso en este mismo centro y quien podría estar gozando de la protección de los funcionarios de la cárcel.
Celia, de 34 años,es una activista y mujer transgénero con gran liderazgo en la Isla de Ometepe (Moyogalpa, departamento de Rivas) que ha sido detenida arbitrariamente en dos ocasiones. En la primera, el 8 de noviembre de 2019, fue privada de su libertad por tres días, sufrió maltrato físico y posteriormente fue dejada en libertad sin cargos. El 21 de abril de 2020 fue detenida por segunda vez al presentarse a la estación policial de Moyogalpa tras haber recibido una citatoria. Desde entonces permanece privada de libertad, siempre en prisiones para hombres, habiendo sufrido interrogatorios en los que se le pregunta por su activismo político, humillaciones y malos tratos por su doble condición de perseguida política y mujer trans, amenazas e insultos por parte del personal del centro penitenciario o privación de acceso a medicamentos, entre otras graves vulneraciones a sus derechos humanos.
Desde finales de mayo, esta situación se ha agravado, según informaciones de que disponemos los trabajadores de la prisión estarían incentivando la hostilidad de otros internos en contra de Celia y otros presos políticos; lo que parece responder a un patrón que se repite en otros centros penitenciarios y contra otras personas presas políticas. Familiares de Celia han reportado que un preso con el que compartía celda la agredió luego de verla socializar con otros internos. El hombre la insultó y luego la golpeó en la cara. El 15 de julio una de las abogadas defensoras de Celia denunció que el interno Erickson Castillo robó y amenazó de muerte al preso político Edwin Mora y que cuando Celia intervino para defender a su compañero agredido, Castillo sacó un puñal y amenazó con matarlos a ambos. La abogada también ha denunciado que, a pesar de las quejas de Celia ante las autoridades y custodios del penitenciario, no se está aplicando el reglamento interno por faltas disciplinarias.
Desde la IM-Defensoras denunciamos estos hechos y le recordamos al Estado nicaragüense que es responsable de la vida y la integridad física, moral y psicológica de Celia Cruz, así como de garantizar el pleno respeto a su identidad sexual y de género.
Hacemos un llamado a la comunidad internacional y a los organismos de derechos humanos para que se pronuncien y activen mecanismos para garantizar la seguridad y libertad de Celia Cruz y las otras tres presas políticas que permanecen injustamente privadas de libertad en Nicaragua.