La madrugada del 20 de abril en República Dominicana, tras haber tenido lugar la 1era Asamblea Nacional, compañeras defensoras de los derechos sexuales y reproductivos integrantes del “Movimiento por las Causales” fueron brutalmente desalojadas por parte de oficiales de la Policía Nacional.
Los hechos ocurrieron en el campamento instalado frente a Palacio Nacional, donde las fuerzas de seguridad causaron destrozos, desmantelaron carpas y lanzaron polvo lacrimógeno poniendo en riesgo la vida, salud e integridad de las compañeras.
Ataques sistemáticos
El Movimiento Tres Causales, el cual lucha por por la despenalización de la interrupción del embarazo en tres causales, ha sido objeto de ataques consecutivos y actos criminales desde hace más de 40 días y dentro del marco de la legítima protesta.
El 18 de abril, 12 personas debieron ser ingresadas en centros médicos después de ingerir postres que les fueron obsequiados y que iban acompañados de una dedicatoria firmada con el nombre “María Teresa Alcántara”. Estos alimentos contenían una sustancia tóxica que causó descompensación, dolores y malestares en las compañeras. La mayor parte del grupo que fue ingresado al centro médico ya fue dado de alta y se encuentra en buen estado, sin embargo, todavía siguen ingresadas dos de las compañeras.
La agresión sistemática contra estas compañeras se ha hecho patente a través de redes sociales y medios de comunicación, con agresores provocando una campaña permanente de desinformación y estigmatización.
Este atentado contra las compañeras marca un pésimo precedente en la región y en la lucha por la libertad y el derecho a decidir sobre nuestros cuerpos.
Una lucha por la vida
Desde la IM-Defensoras, manifestamos nuestra solidaridad con las demandas y resistencia feminista de nuestras hermanas dominicanas. Repudiamos cualquier acción que atente contra la vida e integridad de las compañeras del Movimiento por las Causales y exigimos el cese a la persecución, ataques y actos de intimidación y violencia por parte de la Policía Nacional y cualquier otro grupo agresor.
Defender derechos no puede significar un riesgo para nuestras vidas. La lucha de nuestras compañeras dominicanas es por la vida de todas las niñas, adolescentes y mujeres de América Latina y El Caribe. Las tres causales están ligadas a la garantía de derechos fundamentales, la vida, salud, integridad y autonomía de las mujeres. La violencia contra nuestras compañeras es inadmisible.
Desde Mesoamérica nos mantenemos vigilantes y en resistencia. Estamos con ustedes, compañeras.