La tarde del domingo 30 de mayo, policías nacionales y civiles armados agredieron a un grupo de integrantes de la Asociación Madres de Abril (AMA) que habían llevado a cabo un acto privado en la Universidad Centroamericana UCA en conmemoración de las víctimas asesinadas por el estado nicaragüense en la conocida como la “Masacre del Día de las Madres”.
Según denunció la AMA, la policía atacó a golpes a Francis Mejía, viuda de Marlon José Orozco Largaespada, asesinado el 24 de mayo de 2018 y le sustrajo sus pertenencias; Raquel Sevilla, tía de Tony Merlo, asesinado el 23 de junio de 2018, fue retenida durante 40 minutos e interrogada sobre si llevaba consigo materiales de memoria de las víctimas; mientras que a familiares de Matt Romero, asesinado el 23 de septiembre del 2018 y a otras familias de Masaya les fueron decomisadas camisetas y tarjetas de conmemoración y se les sustrajo dinero en efectivo.
Los ataques contra integrantes de la AMA se han venido sucediendo desde la creación de la asociación en 2018, cuando madres y familiares de personas asesinadas en el marco de las protestas se organizaron para exigir justicia, verdad y reparación por lo que la propia Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha calificado como crímenes de lesa humanidad. El pasado mes de abril, en la conmemoración del tercer aniversario del estallido social y en el marco del proceso electoral, los ataques contra la AMA y sus integrantes se intensificaron, tal y como denunciamos desde la IM-Defensoras.
Desde la IM-Defensoras consideramos muy grave y reprobable que el Estado nicaragüense, con agresiones, abusos y arbitrariedades de todo tipo reprima reiterada y sistemáticamente el derecho de las madres y familiares de víctimas a conmemorar a sus seres queridos, lo que constituye un hecho de crueldad y ensañamiento que solo puede interpretarse como una estrategia para amedrentar, desmovilizar y acallar las voces críticas contra el gobierno.
Ante esta nueva agresión, reiteramos nuestro reconocimiento a la digna labor de búsqueda y exigencia de verdad, justicia y reparación que llevan a cabo las madres y familiares de víctimas del Estado nicaragüense que se articulan en la AMA, así como nuestra preocupación por la integridad y seguridad de todas ellas.
Llamamos a la comunidad internacional a expresar su solidaridad y a acuerpar a la AMA, y a unirse a la exigencia de que cese la represión, la persecución política y el hostigamiento contra personas organizadas en espacios de activismo y participación política en Nicaragua, especialmente, contra mujeres y defensoras de derechos humanos.