Este ocho de marzo nos llama la acción colectiva entre quienes a lo largo de los años y los territorios hemos construido alianzas feministas, hoy nos juntamos para tomarnos la calle que nos ha sido tan negada a las mujeres; nos tomamos la calle como grito contra la impunidad, como ruptura de los mandatos patriarcales y para continuar caminando juntas nuestra política de memoria, justicia y vida.
Nos tomamos la calle para reconocer nuestros caminos, las cosas a las que nos hemos enfrentado históricamente las mujeres desde lo personal, nos tomamos la calle como acto político para manifestar las formas diversas en que hemos colectivizado nuestras fuerzas para hacer frente a un sistema que, por ser mujeres, nos asesina y es altamente violento y nocivo para nosotras.
Seguimos poniendo en lo público nuestras demandas, exigencias y luchas que hace más de una década continúan vigentes hasta hoy; en todas nuestras acciones, pronunciamientos y manifiestos, y este 8 de marzo reafirmamos las razones por las que seguimos luchando como defensoras por nuestros derechos humanos:
Por la libertad y autonomía de nuestros territorios-cuerpos.
Por la libertad y autonomía de los pueblos indígenas, garífunas y el cese a su persecución.
Por la libertad de las defensoras perseguidas judicialmente por las dictaduras desde Nicaragua en América Latina hasta Palestina.
Por la dignidad de las mujeres trabajadoras no reconocidas en los marcos legales pero que sostienen con su trabajo la vida.
Por la libertad de las niñas y su derecho a jugar libres de acoso y vivir sin violencia en cualquier ámbito y espacio.
Por nuestras hermanas, compañeras, y todas las mujeres que han sido asesinadas en las celdas, en la calle, y en sus casas, porque el patriarcado y sus perpetradores han querido privatizar sus cuerpos como el capital y la guerra han privatizado los ríos, las montañas y los territorios.
Por todas las vidas arrebatas por el saqueo de las instituciones públicas por la narcodictadura.
¡Por nuestro derecho a defender derechos humanos! ¡Defendiendo el derecho a defender!