Luego de ser desalojadas el 16 de marzo por agentes policiales en la comunidad de La Bomba, Jutiapa, Atlántida, las integrantes de la Red de Mujeres Campesinas Las Galileas regresaron al territorio, sin embargo, el viernes 24 de marzo a las 9 de la mañana bajo amenazas, fueron nuevamente expulsadas por un grupo de guardias de seguridad.
Las defensoras señalaron que los guardias de seguridad son trabajadores de Luis Ramón Fernández Robles, quien se dice propietario del lugar y las ha denunciado por el delito de usurpación de tierras.
Los guardias llegaron al lugar con armas de alto calibre y amenazaron con usarlas contra las defensoras, además de decirles que venían refuerzos para también expulsarlas.
Cabe señalar que durante el desalojo ocurrido el 16 de marzo por parte de aproximadamente 150 agentes policiales, se sumaron familiares y miembros de seguridad de Fernández Robles, quienes se encargaron de echar gasolina a los pozos de agua que las defensoras tenían y usaban, lo que claramente los hizo inservibles. A ello también se suma el acoso sexual por parte de policías y guardias de seguridad, además de las constantes burlas por parte de los mismos hacia las integrantes de Las Galileas. Estas formas de agresión impactan gravemente en la integridad física, emocional y psicológica de las defensoras y en su labor de defensoría del territorio.
Desde la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en Honduras y la IM- Defensoras condenamos y repudiamos las reiteradas amenazas, agresiones y desalojos violentos contra las integrantes de Las Galileas que únicamente hacen uso legítimo de su derecho a defender la tierra.
De igual manera, hacemos un llamado a la comunidad internacional a visibilizar el caso y a pronunciarse de manera inmediata condenando estos hechos.